Repudio a la represión del gobierno contra la FNC
El Partido de los Trabajadores (PT) condena la actual escalada represiva del gobierno de Lugo-PLRA contra las protestas y cortes de ruta protagonizados por adherentes a la Federación Nacional Campesina (FNC). Esta organización, crítica al gobierno, desde hace semanas viene manifestándose en reclamo de respuestas concretas a distintos problemas que afectan al sector campesino. Días atrás, organizaron un escarche al propio Lugo en Villarrica, a quien corearon “Lugo, dejáte de joder”.
Odilón Espínola, dirigente de la FNC, denunció ayer en la sede del Senado que en los distintos puntos de la protesta, los campesinos viven en un pleno “estado de sitio” y que ni siquiera se les permite reunirse porque la policía los persigue.
El día 2 de julio, la fiscala Lilian Ruiz imputó y ordenó la captura de Sixto Portillo, de Juan Ortigoza, Felipe Aveiro y Lino Morel, todos líderes departamentales de la FNC que llevaban a cabo un cierre de ruta. Portillo, en su momento, dijo que Lugo se está convirtiendo en un “capataz del imperialismo”. La mencionada agente del Ministerio Público sostuvo que no permitiría a los campesinos cerrar “ni por un minuto la ruta” y solicito apoyo de carros hidrantes y anti-motines (ABC, 3/3/9).
En Caaguazú, el día de ayer, se realizó otra brutal represión, dejando como saldo varios heridos y más de 40 detenidos. El operativo policial-judicial se realizó ante una orden de los fiscales Félix Torres, Nelly Varela y Alfirio González, para revisar las carpas de los campesinos con la excusa de buscar “evidencias” que inculpen a los luchadores sociales en el asesinato del comerciante Albino Gamarra Ojeda. El “cateo” se realizo con disparos de balines de goma, cachiporrazos y una implacable persecución de la montada. Las escenas, que recorrieron todo el país, dieron cuenta de la extrema brutalidad con que varios anti-motines golpeaban a ancianos campesinos tendidos en el suelo.
El día 7 de julio, en horas de la mañana, fue detenido Eduardo Ojeda, conocido dirigente sindical, por protestar frente al Ministerio del Interior ante la represión ocurrida en Caaguazú. Según sostuvo Ojeda a medios de prensa "estábamos diciendo que (Rafael) Filizzola es alumno de Montanaro". El castigo ante tal afirmación fue la cárcel. Desafiante, el ministro socialdemócrata Filizzola afirmo que "Ojeda agredió al comandante (…) El agresor está sujeto a asumir penalmente” por el hecho (ABC, 7/7/9).
El gobierno de Fernando Lugo demuestra estar decidido a descabezar al movimiento campesino y sindical. Sus respuestas a los reclamos del pueblo son balas, cachiporras, carros hidrantes, imputaciones y la cárcel. En manos de las organizaciones de nuestra clase y de las izquierdas está el frenar esta política.
Las protestas de la FNC son el reflejo de una insatisfacción creciente en el campesinado, agravada por los golpes de la actual crisis económica. Las masas campesinas presionan a sus dirigencias tradicionales y salen a la luchar pues no se resignan, como les proponen Fernando Lugo y sus aliados de las izquierdas oficialistas, a esperar pasiva y sumisamente hasta el 2023 para concretar la necesaria reforma agraria.
El PT se solidariza con la lucha de la FNC y llama a todas las organizaciones campesinas, sociales y a la izquierda en general a exigir la inmediata libertad de Eduardo Ojeda y los demás campesinos detenidos. Exigimos el inmediato fin de la criminalización y la represión a las luchas sociales. Instamos, asimismo, a mantenernos firmes y unidos en la lucha, confiando solo en nuestras propias fuerzas y manteniéndonos en oposición tanto al gobierno represor de Lugo-PLRA como a la derecha tradicional.
Comité Ejecutivo del PT
Asunción, 7 de julio de 2009
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